Hr. Manuel Domingos de Castro Vasconcelos

Hermano Manuel Domingos de Castro Vasconcelos nació el 3 de Noviembre de 1929 y tenía 91 años. Hizo sus primeros votos el 29 de Septiembre de 1953.

Actualmente vivía en Funchal (Portugal). Pertenecía a la Provincia POR.

A tus manos encomiendo mi espíritu. (Sl 31,6)

(P. José Agostinho de Figueiredo Sousa, scj, Superior Provincial) Hoy celebramos la Solemnidad de Todos los Santos. Al final de la mañana de este día en el que celebramos la vida para siempre ante Dios, recibimos la noticia de la muerte de nuestro querido Hermano Manuel Domingos de Castro y Vasconcelos, el mayor de todos nosotros. El hermano Domingos cumplirá 91 años el martes 3. Ciertamente celebrará con Dios en la comunión de los santos.

El hermano Domingos murió en la Comunidad del Colegio Misionero de Funchal, donde vivió estos últimos años de su vida. Su estado de salud se estaba deteriorando en los últimos tiempos, también como resultado de su edad. Su Comunidad fue incansable en la búsqueda de todos los cuidados que proporcionarían al hermano Domingo un final de vida sereno y debidamente acompañado y fue en este contexto de comunión fraternal y cuidado que el hermano Domingo regresó a la casa del Padre.

En el corazón de todos nosotros, miembros de la familia, cohermanos, miembros de la Familia Dehoniana, amigos y bienhechores, y de todos aquellos que han tenido el privilegio de conocer al Hermano Domingo, permanece el recuerdo de una vida marcada por la sencillez y la humildad, el don y el servicio, la dedicación y la fidelidad a la consagración a Dios y a los Hermanos. Que descanse en paz, en eterna comunión de vida y amor, con el Padre de la misericordia.

Dadas las contingencias del momento actual, no ha sido posible aún confirmar con las autoridades municipales el calendario preciso de las celebraciones funerarias. Pero tendrán lugar el martes 3, el mismo día en que el hermano Dominic celebraría su 91 cumpleaños.

El hermano Manuel Domingos de Castro e Vasconcelos nació el 3 de noviembre de 1929 en la isla de Porto Santo, en el archipiélago de Madeira. Fue bautizado el 14 de noviembre de 1929 en la parroquia de Nuestra Señora de la Piedad, Porto Santo, y confirmado el 18 de junio de 1950 en la parroquia de Santa Lucia, Funchal.

Ingresó como aspirante a religioso en 1949 en el Colegio Misionero de Funchal, donde permaneció hasta 1952. Ese año se fue a Italia y fue recibido como postulante el 19 de marzo de 1952 en Albissola y como novicio el 28 de septiembre de 1952 en el mismo lugar. También allí hizo su primera profesión el 29 de septiembre de 1953, convirtiéndose en el primer portugués en hacer su profesión en la Congregación de los Sacerdotes del Corazón de Jesús. Habiendo regresado al Colegio Misionero de Funchal, hizo su profesión perpetua allí el 29 de septiembre de 1956.

Domingos dedicó toda su vida de religioso dehoniano al servicio de ecónomo o asistente de ecónomo en las comunidades por las que pasó: Funchal I – Colegio Misionero, Coimbra – Instituto Misionero, y Oporto II – Seminario Misionero Padre Dehon. El hecho de haber permanecido en este servicio durante largos períodos, especialmente en las comunidades del Colegio Misionero y del Seminario Misionero P. Dehon, lo convirtió en un punto de referencia en la vida de todos los que asistían a nuestros seminarios menores. Siempre lo recordaremos con gratitud por su vida dedicada y ejemplar.

Que descanse en paz, que el Corazón de Cristo le recompense por el bien que ha hecho y le acoja en su infinita Misericordia.

 Consagración al Corazón de Jesús (Oración que el hermano Domingo rezaba todos los días)

 Sagrado Corazón de Jesús, Me consagro a ti.
Te doy todo lo que soy y todo lo que tengo.
Quiero adorarte en todos los tabernáculos de la tierra,
¡especialmente donde se te olvida u ofende más!
Te agradezco todas las gracias que me has concedido.
y que no siempre he agradecido!
Humildemente pido perdón por todos mis pecados.
y el daño que pude haber causado a mis hermanos con ellos!
Pido la gracia de la conversión.
Haz que mi corazón sea como el tuyo.
Ayúdame a llevar mi cruz no sólo sin revueltas,
pero con paciencia, amor y alegría.
Te doy todos mis problemas, dolores,
preocupaciones, angustias, humillaciones y dificultades…
¡Confío en su misericordia que todo me ayudará a resolverlo!
Te pido por todos aquellos que más sufren
y para todos aquellos que se recomiendan a mi pobre oración;
¡Enciérranos a todos en tu amado corazón!
Con María y para María,
Quiero amarte hasta que muera
y te veré para siempre en el Reino de la Gloria Eterna! Amén.