La Provincia de BRE celebró un Encuentro de Formación Permanente para los religiosos con el tema: "La fatiga de la compasión. El síndrome de burnout y el agotamiento de los religiosos hoy".
La Provincia de Brasil Recife celebró del 9 al 11 de noviembre un Encuentro de Formación Permanente para los religiosos de la Congregación con el tema: “La fatiga por compasión. El síndrome de burnout y el agotamiento de los religiosos hoy”.
La reunión tuvo lugar en la sede provincial de Recife y fue facilitada por el psicólogo Adalto Chitolina, que habló con nuestro equipo de comunicación:
1) ¿Cuál es la importancia de este tipo de reuniones para la Iglesia?
Es sabido que en todas las actividades profesionales hay un reciclaje constante. Para algunas profesiones es necesaria una profundización intelectual; para otras, una formación más actualizada para desempeñar mejor su trabajo. En nuestro caso, la Iglesia, estos momentos de Formación Permanente se convierten en una ocasión para reflexionar y mirarse a uno mismo. Al igual que otras actividades, la nuestra también se centra siempre en el cuidado de los demás. Siempre se busca que el sacerdote sea un punto de alivio de la tensión de los problemas de la vida a los que se enfrenta la gente. Pero también tiene que cuidarse a sí mismo. Otro aspecto es el hecho del encuentro entre iguales. En su actividad parroquial o pastoral, suele estar solo, o a lo sumo con un colega. Estar con un grupo mayor, donde se comparten la vida, los retos, las alegrías, las preocupaciones, los éxitos y las dificultades, es siempre una ocasión favorable para mirarse también a uno mismo.
2) ¿Qué revela este tema a toda la Iglesia?
Yo sería más enfático al afirmar: este tema “expone” una de nuestras realidades. Nos estamos agotando física, psíquica y espiritualmente. Impulsados por la necesidad de ayudar, nos distanciamos de nosotros mismos y entramos en la “rueda viva” del activismo sin darnos cuenta. La gran mayoría de los sacerdotes están muy cerca del síndrome de Burnout, no porque lo quieran, sino por la excesiva dedicación y entrega a sus propias actividades.
Crece la percepción de cómo muchos actúan en exceso, y con un fuerte espíritu de compromiso evangélico, ¡pero sin alma! Hay una dedicación evidente, pero también hay un grito que brota del fondo del alma de estos hombres, pidiendo ayuda. Y si no escuchamos este grito, corremos el riesgo de ver materializado el desastre que se anuncia. Prueba de ello son los suicidios de sacerdotes que se han producido, ¡nueve sólo en 2021!
Cuando el trabajo se convierte en la motivación de la vida de un sacerdote, de un religioso, es como si sonara la campana de alarma. Toda búsqueda excesiva de algo apunta a una posible forma de escapar o compensar las deficiencias. Y el activismo va en esta dirección.
Por lo tanto, el análisis de este tema acaba siendo una confrontación con la realidad de la gran mayoría de nosotros.
El Superior de la Provincia de BRE, P. Josemar Joaquim de Lima, scj, también destacó la importancia de este tipo de encuentros y de este tema a nivel provincial:
Como religiosos, tratamos de tener un programa anual de encuentros para que sea un espacio de condivisión, construcción, convivencia y espiritualidad. Momentos como éste, además de unirnos, nos ayudan a recorrer un camino que permite a todos el crecimiento humano y espiritual.
El Gobierno Provincial ha pensado y construido este tema como una forma de prevención para nuestros sacerdotes. Para darnos una idea de la necesidad de discutir este tema, sólo este año, en Brasil, se han quitado la vida nueve sacerdotes. Otros siguen mostrando una gran fatiga y falta de motivación en el viaje, y otros, una tendencia al aislamiento. Conocer este tema nos ayuda a recorrer un camino y a mirarnos a nosotros mismos, evitando dar razones para que este síndrome se desarrolle en cada uno de nosotros. Por último, este encuentro nos permitió ver qué podemos hacer para tener una vida más sana mental y espiritualmente.