En Polonia, gran alegría por la ordenación de dos sacerdotes (Uladzislau Chuiko, Wojciech Olszewski) y tres diáconos (Adam Maj, Karol Szlezinger y Paweł Szlezinger).
El 14 de mayo, en la iglesia parroquial del Sagrado Corazón de Jesús en Stadniki (Polonia), por Su Excelencia Jacek Kiciński CMF, obispo auxiliar de la archidiócesis de Wrocław, fueron ordenados dos sacerdotes dehonianos junto con tres diáconos dehonianos: Uladzislau Chuiko, Wojciech Olszewski Adam Maj, Karol Szlezinger y Paweł Szlezinger .
La celebración del sacramento del orden reunió a invitados de Polonia y del extranjero, entre los que se encontraban los familiares y amigos de los recién ordenados, sus párrocos y cohermanos, que fueron recibidos al comienzo de la liturgia por el rector del seminario, el P. Leszek Poleszak SCJ.
En su homilía, monseñor Jacek Kiciński dijo que toda vocación de servicio en la Iglesia es un misterio de Dios y un don de su amor. La vocación es una cuestión de amor.
En este contexto, el obispo recordó las palabras de Cristo sobre la elección y la vocación, escritas por San Juan: “No me habéis elegido vosotros, sino que yo os he elegido a vosotros y os he destinado para que vayáis y deis fruto y vuestro fruto permanezca” (Jn 15,16a). Esta expresión de Jesús resume la esencia de toda nuestra vida y vocación, porque ser elegido por Jesucristo es dejar que mi vida sea de su propiedad.
Refiriéndose a las enseñanzas del Papa Francisco, el obispo también pidió a nuestros hermanos que sean tanto los que ‘huelen a oveja’, dedicando su vida a ello, como los que llevan ‘el olor de Dios a las ovejas’. Siguiendo el ejemplo de Jesucristo, los jóvenes sacerdotes y diáconos dehonianos son enviados a hacerlo caminando no sólo en coche, sino también a pie por las calles de las ciudades y pueblos: “Al pasar por las ciudades y pueblos hoy -explicó el obispo- debemos detenernos en el rostro de cada persona concreta, como nos enseñó el Señor Jesús. (…) Anunciar al mundo de hoy el amor del Sagrado Corazón de Jesús.
