Por una Economía para Todos #4

El cuarto y último día del Seminario Teológico de Madrid ha sido de síntesis. Tras una intensa jornada de conferencias (8 de mayo) y dos días en los que las Comisiones Teológicas continentales expusieron sus reflexiones (9-10 de mayo), la jornada de clausura ha requerido a los participantes, en primer lugar, un intercambio de puntos de vista en sus grupos continentales para identificar, en sus propios contextos, a partir de lo que habían escuchado, los retos más urgentes, las oportunidades que hay que aprovechar y los recursos (culturales y carismáticos) que los dehonianos pueden poner en juego para acompañar el paso hacia una economía inclusiva, sostenible y justa.

Una vez compartidas las reflexiones de los grupos, llegó el momento para el texto del Mensaje final, preparado por un comité de redacción y debatido en la asamblea. La necesidad de salir de una visión depredadora en relación con la creación para centrarse en una economía humana y ecológica; la urgencia de imaginar, implementar y gestionar buenas prácticas en el uso de los recursos; el reto de invertir la tendencia a la privatización, centrándonos en los recursos que hemos aprendido a definir como “comunes”, cuya gestión implica al otro y al diferente en una relación por la que deja de ser extraño y rival para convertirse en hermano y hermana. Del lado carismático, el desafío es reparar las heridas producidas por la visión económica dominante y repensar la oblación -que es un horizonte empático, dócil y respetuoso- como un camino relacional indicado por el Espíritu.

El Mensaje -en el que se esbozan algunas propuestas e hipótesis de trabajo- se publicará próximamente y se entregará a toda la Congregación, para que lo vivido en Madrid sea sólo el principio de un compromiso concreto y duradero sobre una cuestión social de importancia epocal.