La conclusión de una etapa no marca en absoluto el fin del camino emprendido; al contrario, representa simplemente un momento de transición que abre las puertas a nuevas perspectivas y oportunidades.
Con gran emoción llegamos a la conclusión de nuestro recorrido en el proyecto de la Beca para los Estudios Dehonianos (BSD) promovido por el Centro de Estudios Dehonianos (CSD). Durante estos dos años de formación intensa, hemos tenido la oportunidad de vivir una experiencia extraordinaria que ha dejado una huella profunda en nuestras vidas.
Desde nuestro ingreso oficial al proyecto el 4 de octubre de 2021, nos hemos dedicado con compromiso y pasión al estudio profundo de la historia y el carisma dehoniano. A través del intercambio de los resultados de nuestras investigaciones y la participación activa en las actividades del CSD, hemos logrado sumergirnos por completo en este patrimonio de conocimiento. Este período ha sido no solo extremadamente enriquecedor, sino también significativo para nuestro camino de formación personal y espiritual.
Lo que hace única esta experiencia en comparación con un curso académico tradicional son las diversas oportunidades que se nos han presentado. Hemos participado en numerosos seminarios, talleres, encuentros, conferencias y cursos, enriqueciendo nuestra formación con enfoques diferentes y nuevas perspectivas. Pero aún más importante, estas experiencias se han vivido con un auténtico espíritu de diálogo y colegialidad. Hemos aprendido no solo de las enseñanzas académicas, sino también del intercambio y la compartición de experiencias con nuestros compañeros de camino.
Un aspecto especialmente significativo de esta experiencia ha sido la oportunidad de vivir en una comunidad internacional. Residir en Roma II nos ha brindado la increíble oportunidad de conocer y compartir la vida con hermanos de todo el mundo. Este intercambio intercultural ha enriquecido nuestro camino de manera extraordinaria. Hemos podido conocer diferentes realidades eclesiales y congregacionales, compartiendo sus desafíos, sus esperanzas y sus perspectivas. Esta apertura internacional ha ampliado nuestros horizontes y nos ha brindado una visión más amplia e inclusiva del carisma dehoniano.
Queremos aprovechar esta oportunidad para expresar nuestra profunda gratitud al Gobierno General, al Centro de Estudios Dehonianos y a todas las personas involucradas que nos han acompañado en este camino formativo. Su apoyo y orientación han sido fundamentales para nuestro aprendizaje y crecimiento. Vivir en Roma y tener la oportunidad de sumergirnos por completo en el estudio de la figura del Padre Dehon y de nuestra Congregación ha sido una experiencia extraordinaria que ha enriquecido significativamente nuestra vida.
Miramos con entusiasmo hacia el futuro, conscientes de que los frutos de esta experiencia seguirán creciendo y nutriendo nuestra vida y nuestro compromiso dehoniano.